Cuando te escribí una carta abierta antes de las elecciones del 20 de diciembre del 2015, nunca te imaginaste que serías candidato a las elecciones del 26J.
Sé que sigues sin saber quién soy y que tampoco leíste aquella carta.
Sin embargo, hoy te vuelvo a escribir para recordarte que sigues olvidándote de la música y la cultura.
De hecho, si necesitamos volver a las urnas, es por falta de educación.
De educación musical.
Aquella que no recibiste y que siguen sin recibir como deberían muchos niños hoy en día.
Porque cuando a un niño le enseñas a disfrutar de la música, estás haciendo mucho más.
Estás consiguiendo que sepa escuchar.
Ser flexible.
Comunicarse.
Subordinar sus propios intereses a los del conjunto.
[Tweet “Carta a @marianorajoy @sanchezcastejon @Albert_Rivera @Pablo_Iglesias_ @agarzon #26J”]
¿Te das cuenta por qué es tan importante la música y la cultura en nuestro sistema educativo?
¿Especialmente para todos aquellos que, como tú, queréis decidir nuestro futuro?
Vivimos un hecho histórico con la repetición de estas elecciones y en parte no es culpa tuya.
No lo es porque, como muchos lo somos en diferente medida, eres víctima de un sistema que nunca funcionó.
Sistema que ha obviado reiteradamente la educación musical en nuestro modelo de enseñanza.
Sin música, no hay comunicación.
Tampoco diálogo.
Aquél que faltó para evitar repetir las elecciones.
[Tweet “Carta a @PPopular @PSOE @CiudadanosCs @ahorapodemos @iunida http://ow.ly/TF0j3001kGb #música #cultura #26J”]
Pero no te equivoques.
Cuando me refiero a educación musical no me refiero a la que tu recibiste de pequeño.
Tampoco a la que reciben hoy en día muchos de nuestros menores.
Los que tienen esa suerte.
Impartida por profesores que, aunque pusieron y ponen todo su empeño en ello, no cuentan con el favor del sistema ni con una formación que les permita desarrollar su talento y el de nuestros menores.
[Tweet “La música y la cultura deben ser el motor de cambio para esta sociedad #26J”]
Yo me refiero a algo que tenemos que desarrollar todos juntos de una vez por todas.
Construyendo.
No borrando cada 4 años lo que hicieron los demás por intereses de otro tipo.
La música y la cultura no generan valor económico.
Generan mucho más.
Dan valores a una sociedad.
Nos enseñan respeto y tolerancia hacia los demás.
Pero especialmente potencian la creatividad necesaria para resolver los problemas que nos afectan a todos.
Como te dije en su día, somos muchos los profesionales del mundo de la música que llevamos mucho tiempo queriendo un cambio.
Desde las escuelas de música hasta nuestras orquestas, pasando por los conservatorios o las grandes instituciones culturales.
[Tweet “Carta a @Herzogoff @franceschoms @DuranLleida @gabrielrufian @komaur @AITOR_ESTEBAN #26J”]
Por eso te tiendo una mano una vez más, para que cuentes con nosotros.
Porque somos nosotros los que podemos ayudarte.
Sabemos y podemos gestionar nuestro futuro.
El de todos.
Estamos preparados.
Llevo demasiado tiempo viendo en la distancia cómo se deteriora nuestro sector por falta de medios y la atención necesaria.
Por falta de oportunidades.
Por pura desmotivación.
[Tweet “Carta a @Esquerra_ERC @compromis @Equo @ConvergenciaCAT http://ow.ly/TF0j3001kGb #música #cultura #26J “]
Sin embargo, hoy más que nunca, quiero enviarte un mensaje de esperanza en esta carta abierta como candidato al 26J que eres.
Todavía estamos a tiempo.
Políticos, profesionales e instituciones debemos trabajar juntos para construir un futuro.
Donde música y cultura sean los motores de esta sociedad.
Sí.
No lo niego.
Tienes razón si piensas que esta situación es en parte culpa nuestra.
De los profesionales del sector.
[Tweet “Carta a @ppextremadura @unio_cat @coalicion @obloque @eajpnv http://ow.ly/TF0j3001kGb #música #cultura #26J “]
Llevamos mucho tiempo dejando que sean otros los que solucionen nuestros problemas y echando la culpa a los demás de todo aquello que no funciona.
Pero por eso este blog.
Por eso muchos otros.
¿Me guardas un secreto?
En realidad, mi trabajo nada tiene que ver con las redes sociales para el sector de la música y la cultura.
Es una forma de llamar la atención a la sociedad y a nuestro sector de que tenemos que cambiar todos juntos usando herramientas de cambio y comunicación muy potentes.
Una llamada también para ti para que nos escuches y no te olvides de la música y la cultura.
[Tweet “Carta a @socialistes_cat @iniciativa @geroabai @amaiurinfo http://ow.ly/TF0j3001kGb #música #cultura #26J”]
Por eso no me importa si te molesta que alguien tuitee en un concierto.
A veces a mí también.
Especialmente cuando esto se convierte en un objetivo y no en un medio.
Pero me molesta mucho más que estemos perdiendo la oportunidad de devolver la música a la sociedad.
Porque ni es tuya ni es nuestra.
Es de todos.
¿Nos ayudarás esta vez?
De acuerdo en todo excepto cuando dices que los profesores no tenemos formación para desarrollar nuestro talento. Si mis años de conservatorio y mi licenciatura en Musicología no han servido para ello, mal puedo ejercer mi labor docente desde hace 22 años.
Gracias por la carta abierta. A ver si sirve para algo.
Saludos
Gustavo Valbuena
Profesor de música del IES Tomás Mingot (Logroño/La Rioja)
Estimado Gustavo,
muchas gracias por tu comentario. Mi respeto y admiración es absoluto para todos los profesionales que en clara desventaja con la formación que reciben otros profesionales en otros países, hacen, hacéis, una labor encomiable.
Nuestro país es posiblemente uno de los que más talento atesora tanto en la docencia como entre nuestros alumnos. Sueño con que un día el sistema ayude a desarrollar ese talento con total plenitud.
Saludos,
David
Y ni mucho menos pienso, como él, que sea tu caso uno sobre el que quejarse me agrada incluso conocer que alguien de conservatorio de clase en un instituto.
Hola Iván,
muchas gracias por tus comentarios.
Lo cierto es que en un sistema que funciona a base de puntos es muy difícil que prime la calidad. No digo que sea imposible. Pero es muy complejo.
Creo que debemos usar lo mejor de cada mundo para que las clases de música, desde el colegio, sean de la más alta calidad (y calidez) y para que el músico profesional esté comprometido en esa labor educativa tan necesaria.
En el conservatorio no nos enseñan bien a dar clase. Menos a niños. En las escuelas de Magisterio, el nivel musical no puede ser nunca con el que se ha formado para ser músico. ¿Por qué no nos unimos aprovechando lo mejor de ambos mundos? ¿Por qué no creamos una nueva forma de acercar la música a la sociedad?
Gracias por tu aportación, Iván.
Saludos
Me imagino que David se refiere a la gran cantidad de profesores que no tienen idea de música pero se cogieron esa rama en Magisterio porque parecía coqueta, más fácil o nk podían con otra rama. Esto hace que sean profesores sin formación musical y aun así tienen preferencia en colegios públicos pues lo suyo es una carrera y los que somos músicos de conservatorio no la tenemos y o hacemos un master caro y en el que tampoco aprendamos mucho mas que hacer muchos trabajos como es el Master de secundaria hoy dia. Que tengamos mejores profesores que hace 40 años o incluso 20 (con personas que consiguen su puesto y le obtienen esas asignaturas para rellenar horario) no quiere decir que estemos bien. Y por supuesto el sistema no ayuda ni sobre el papel, ni en la práctica pues, todo lo que he mencionado, en mayor o menor medida según las zonas, pasa… y es muy triste.
Un saludo
Hola David, fuimos a clase de armonía juntos en el conservatorio, ¿recuerdas? Ahora soy profesor de música en instituto. Gracias por tu artículo. Enhorabuena por tu carrera músical, te lo mereces todo, tantos años de estudio… La situación en secundaria es muy complicada, y en primaria creo que es aún peor. Ahora mismo trabajar en serio en un proyecto eminentemente práctico y profesional con alumnos sólo genera malestar en el entorno de inspección y a veces en los equipos directivos. La prioridad es no recibir ni quejas ni reclamaciones de ningún padre, sin entrar nunca a valorar los hechos. Se quiere quedar bien con gente que rechaza la música y el arte. Se presiona a los profesores a una burocracia totalmente incompatible con una clase de música de calidad. Y ni te cuento el tema de la evaluación, totalmente patético. Si no apruebas a todo el mundo no hay más que problemas y más problemas. El sistema no funciona, lo mires como lo mires. Un abrazo, amigo.
Querido Joan,
claro que te recuerdo. ¿Cómo te va la vida amigo? Me alegro que estés haciendo esa labor tan necesaria desde tu trabajo de profesor de música.
Si te fijas, el sistema no ha cambiado a penas desde que tú y yo estudiábamos música en esas largas tardes de conservatorio. Si me apuras, ha cambiado bastante poco desde que nuestros profesores estudiaban. Sin embargo si miramos alrededor, la sociedad es totalmente distinta. La clave está en que todos tenemos que hacer lo posible por cambiar el sistema. Empezando por tu instituto y pasando por la escuela de música, el conservatorio, la clase de primaria, la orquesta profesional y las plazas de nuestros pueblos.
La música y la cultura no es ni de izquierdas ni de derechas. No sabe de burocracia ni procedimientos. Es de todos y a todos nos pertenece. Con calidad y calidez.
Muchas gracias por tu comentario y por recordarme aquellos tiempos donde soñábamos con un futuro mejor para el mundo de la música y al cultura. Mucho ánimo, porque cada día estamos más cerca de cumplir ese sueño.
Un abrazo,
David