Con este post, pretendo comenzar una serie de artículos dedicados al trabajo de jefe de fila o sección en una orquesta, dando una visión personal de la función basándome en mi propia experiencia al respecto. Pretendo con ello acercar a todo el público los entresijos de una orquesta, concretamente de una sección de cuerda, buscando además abrir un debate sobre los desafíos que nos crean las nuevas exigencias técnicas, sociales y económicas en nuestros días.
Entiendo que no hay profano que no sepa que una orquesta, independientemente de su tamaño, es un conjunto de músicos que se reúnen para interpretar juntos una obra musical escrita para los instrumentos que la componen. Suelen estar formadas por instrumentos de cuerda sólo, o cuerda y viento. Los miembros de la misma, pueden tocar siguiendo a un líder musical que no tiene porque ser necesariamente un director de orquesta. Aunque sea aconsejable contar con un director para las agrupaciones más grandes, históricamente esa responsabilidad recaía en el concertino o clavecinista, que hacía una interpretación de la partitura general mientras tocaba liderando al resto de instrumentistas.
Con el nacimiento en el siglo XVIII de las primeras orquestas sinfónicas fijas en Manheim y Viena, se empezó a regularizar la jerarquía orquestal. El principal responsable de la misma era el director de la orquesta que en muchos casos era el mismo compositor de las obras compuestas para la formación. Éste se asistía principalmente del concertino o primer violín y era encargado de tocar los solos de violín.
En seguida la complejidad de las obras compuestas, exigieron orquestas más grandes donde otros instrumentos, también de cuerda, debían tocar solos en contraposición a los pasajes unísono (Tutti). Las secciones de los distintos instrumentos necesitaban también sus propios “concertinos” o jefes de sección que ayudasen al director y concertino en su labor de liderar la orquesta y se encargasen de tocar los solos de su grupo instrumental.
Por esto en la orquesta moderna los instrumentos de cuerda disponen de un concertino (responsable de todas las cuerdas y asistente del director), y jefes de filas de los segundos violines, violas, violonchelos y contrabajos. Cada uno de ellos, tiene a su vez un asistente que se sienta a su lado y que ayuda al jefe de filas a llevar a cabo su función. Es por ello que la función del jefe de filas, también llamado principal o solista de una sección, es de gran importancia para el funcionamiento de una orquesta para conseguir los objetivos artísticos y organizativos de la formación.
Y la fila, tiene subdivisión?
Hola Julio, ¿a qué te refieres exactamente?
Hola, me gusto como comentaste tu post, tienes algo más especifico sobre las responsabilidades propias de los principales, cual es su importancia y funciones en el cargo? Donde lo podría consultar? Gracias
Hola Rosalía,
muchas gracias por tu comentario. La verdad es que no hay mucho escrito al respecto. Pero te adelanto que estoy preparando la continuación de este artículo que espero publicar en unas semanas.
Un saludo muy cordial,
David